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deas sobre el emprendimiento existen muchas, todo el mundo considera tener la idea que lo hará millonario de la noche a la mañana, sin embrago, una gran parte no toma en cuenta ciertos factores que le podrían hacer caer del sueño a la pesadilla en el menor tiempo posible.
Lo cierto del asunto es que son muy pocos los que realmente toman en consideración los pros y los contras de emprender una empresa o negocio, no es fácil cruzar el puente del hermoso sueño hasta la realidad en ocasiones cruel.
El emprendimiento se trata del efecto de emprender, un verbo que hace referencia a llevar adelante una obra o un negocio. El emprendimiento suele ser un proyecto que se desarrolla con esfuerzo y haciendo frente a diversas dificultades, con la resolución de llegar a un determinado punto.
Pero para que una idea se materialice es necesario conjugar una serie de factores:
- Definir un plan de negocios, cuantificando inversiones y costos.
- Analizar la cadena de valor del negocio.
- Estar en conformidad con las regulaciones.
- Formar un equipo.
- Conseguir capital.
Un nuevo negocio o empresa nace de la idea y esta a su vez proviene de distintas fuentes, aunque en ocasiones la idea de emprender puede llegar de la manera menos esperada, pero lo importante de todo es que usted pueda seguir una serie de pasos para que su idea se transforme en un negocio tangible.
La vocación del emprendedor es un requisito fundamental, tanto como ser consciente de las propias capacidades y debilidades para afrontar el desafío. También hay que estar preparado para enfrentar la derrota. Un emprendedor debe tener los pies sobre la tierra y cuotas iguales de optimismo y realismo. Debe lograr que los que trabajan con él se sientan con el derecho y la obligación de ser también emprendedores.
Afirmarse en seis pasos
1) Percibir la oportunidad
Al descubrir una oportunidad, el emprendedor genera una idea para aprovecharla. Muchas veces alcanza con dar respuesta a una necesidad en un rubro explotado en forma inadecuada, o lanzar un producto que complemente otro ya impuesto. Luego, hace falta encontrar la motivación y la capacidad para hacer que esa idea en bruto sea viable.
2) Cuestionar la idea
La idea en bruto debe superar una serie de filtros que permitan determinar si realmente existe una idea fuerza.
3) Hacer un análisis económico y financiero
Mediante un análisis económico, se identificarán los ingresos y los costos para obtener la rentabilidad del proyecto. Y a través de un análisis financiero se determinarán las necesidades de inversión de capital, y el tiempo en que se espera recuperar dicha inversión.
4) Definir estrategias
Es el proceso mediante el cual se define el plan de acción, que se utilizará para posicionar al emprendimiento, satisfacer a los clientes, competir con éxito y lograr un desempeño del negocio que garantice la rentabilidad.
5) Planificar e implementar
Para asegurar la perdurabilidad del proyecto hay que tener un plan de negocio realista que neutralice a los competidores actuales y futuros. Este plan no es otra cosa que un “mapa” para orientar al emprendedor, de manera que sepa cómo llegar al objetivo definido.
6) Evaluar permanentemente
Ser buen emprendedor significa, además, saber retirarse a tiempo. Esto implica la capacidad de determinar cuándo el negocio ha dejado de ser una oportunidad. La empresa debe repensarse constantemente para monitorear si está en el camino adecuado e introducir las variantes necesarias para asegurar su viabilidad. Para los verdaderos emprendedores, el fracaso es como un lugar de descanso para analizar lo ocurrido, procesar la experiencia y tomar fuerza para encarar un nuevo proyecto.