El sector público en USA profundiza la normalización iniciando el 2022.
Cambiar al trabajo remoto en muchas agencias gubernamentales desencadenó que sector público comience a sopesar los beneficios en los entornos de trabajo híbrido y a revaluar las prácticas de contratación desde el año pasado.
Trabajar para el sector público en 2020 significó a los trabajadores un cambio de desempeño a lo más remoto posible y mantener el negocio del gobierno en marcha en circunstancias extraordinarias con riesgos de pandemia. Sin embargo, el 2021 dejó una historia diferente que proyecta una fase acomodaticia a las necesidades gubernamentales, que el sector público norteamericano abordó con la adopción de herramientas digitales y facilitando el trabajo remoto para agilizar las operaciones administrativas diarias. La tecnología ahora forma parte de una «nueva normalidad» en el trabajo estatal y local, trascendiendo el cambio dramático al Teletrabajo que se adoptó masivamente en 2020, dejando huella en los lugares de trabajo del gobierno y un panorama posterior sobre el sector tecnológico estatal y local. Así que muchas oficinas han fortalecido la experiencia del trabajo desde casa, así como la capacidad para trabajar de forma remota.
Según el Pew Research Center, (grupo de investigación con expertos estadounidenses, no partidistas, establecido en Washington, D.C. desde el 2004 para documentar información sobre temas sociales, opinión pública y tendencias demográficas trascendentes tanto en USA como en el mundo), un 46 por ciento de trabajadores, sin experiencia en laborar a distancia antes de la pandemia, ahora prefieren el Teletrabajo, al menos a tiempo parcial o como parte de un modelo “híbrido” que combina facetas del trabajo presencial digital y tradicional. Afirma, entre sus referencias difundidas,que por ejemplo, en abril de 2021 alrededor del 95 por ciento del equipo de Dun & Bradstreet; una compañía global que provee productos de inteligencia artificial para unidades de negocios a través del manejo de bases de datos y software analítico; operó efectivamente de forma remota a diferencia de otras organizaciones gubernamentales.
Definitivamente, en solo un par de años los cambios de preferencia operacional entre trabajadores y funcionarios directivos han obligado a las gerencias de recursos humanos y de TI a repensar la gestión de los lugares de trabajo, así como el proceso de contratación, por lo cual la modalidad del Teletrabajo se convirtió en una consideración y alternativa de importancia en el ámbito organizativo del gobierno en general.
Muchas agencias gubernamentales han determinado que la mayor parte de su personal seguirá trabajando principalmente desde casa. Tal es el caso de Tennessee- Government Technology, cuya Dirección de Tecnología de Información comenzó a modelar las necesidades de las agencias de desarrollo de la fuerza laboral en 2021, asegurando que si el Departamento de Salud, por citar un caso, establece que sus funcionarios volverán a trabajar tres días a la semana, y dos días a la semana es posible trabajar desde casa, el equipo de TI que respalda la unidad organizativo se ajustará esa misma programación de trabajo.
Todo esto se suma a un futuro más flexible para el trabajo del gobierno, especialmente a medida que que se superan las olas de variantes de COVID-19 y el aumento repentino de casos. Ya que considerar opciones extremas, como toda actividad presencial o toda remota, puede ser demasiado estricto en cuanto al empleo para el sector público.
En otra perspectiva, el mundo de la educación pública categorizado en K-12 y superior, alguna vez considerado uno de los más resistentes a los esfuerzos de digitalización en el sector público al igual que sus contrapartes gubernamentales, debió adoptar la nueva flexibilidad que ofrece la tecnología, vista como un medio para mejorar la instrucción en lugar de una distracción para los estudiantes.
La situación explanada representa un progreso significativo en la expansión del acceso a Internet y a los dispositivos tecnológicos para el aprendizaje por modalidades remota e híbrida. Visto en cifras, una encuesta realizada en febrero de 2022 por RAND Corp. (ONG que orbita en el ámbito de la Fuerza Armada norteamericana) develó que alrededor del 20 por ciento de las escuelas comenzaron a ofrecer y difundir cursos en línea para familias que optaron por seguir participando en el aprendizaje remoto, aún cuando millones de estudiantes regresaron a las aulas físicas en 2021.
Parece que la conectividad a Internet y el acceso a los medios tecnológicos para funcionar efectivamente con ello ahora se consideran una parte central del proceso del aprendizaje en mundo global, en lugar de un lujo o de una solución rápida para el cierre temporal de escuelas. Bajo esta premisa, las expectativas sobre evolución en las modalidades de labor y actividad remota o híbrida, junto con las demandas de financiación implícitas, tenderían a permanecer en el tope de prioridades del sector público en el norte hemisférico.